¿Por qué nos marcó aquella maestra de la que es imposible olvidarse?, ¿qué hizo aquel maestro para conseguir que amáramos su asignatura? Cuestiones como estas nos hablan del maravilloso arte de educar, y nos advierten de un hecho que no debería pasar desapercibido: ser maestro y maestra es algo más que saber y saber hacer. Es saber ser, o mejor dicho, saber ser de una determinada manera. La formación universitaria no debería desatender el carácter de las personas que quieren dedicarse a la educación. El tema no es baladí, porque el carácter de un maestro puede conseguir extraordinarios resultados o provocar efectos desastrosos en su alumnado. Este libro, fruto de la investigación de diversos autores, presenta ideas sobre la formación del carácter de quienes quieren cambiar el mundo a través de la educación.